Los Juegos Del Destino

Esta es una obra registrada bajo derechos de autor, con el Registro individual 2110199563373 Safe Creative.Todos los derechos reservados. Queda totalmente prohibida Cualquier reproducción o adaptación sin Autorización de la Autora. ADVERTENCIA: Este libro es una obra ficticia, los personajes, hechos, situaciones y lugares son sacados de la imaginación de su muy demente e inmadura autora, Es totalmente ficticia, toca temas sensibles y tiene actos violentos, si no se adapta a su estilo de lectura o no se adecúa a sus gustos, por favor deslilce hacia otras historias y evite dejar insultos innecesarios, lo que pasa aquí es imaginario pero sus insultos son reales y si que es violencia. Los personajes pueden llegar a ser groseros, machistas, clasistas, tontos y desubicados: situaciones ridículas y absurdas, humor negr0 y cliché por montones, repito una vez mas, si no se adapta a tu estilo de lectura, por favor, te lo pido, no me leas, este no es un nobel de literatura, es una historia loca que escribí a mis 14 años y mi primer intento de escritora. EMMA Mi nombre es Emma Roberts, tenia apenas 20 años cuando me casé con Benjamín Black, hijo único de un matrimonio acaudalado con el cual mis padres tenían negocios en común desde que yo era una niña, Ben como me gustaba llamarlo, era mayor que yo por tres años, así que cuando estábamos en la escuela el iba unos grados por encima de mi. Cada vez que lo veía por los pasillos caminando con ese porte y esa chulería soñaba con el día en que el se daría cuenta que yo era la mujer de su vida; es que no era posible que en el mundo existiera un hombre tan hermoso tanto por dentro, como por fuera. También me volvía loca por su enorme parecido con Henry Cavil, por eso cada vez que lo veía soñaba con que el era mi Superman al rescate y yo una Lois Lane súper rubia, no me juzguen, algunas sueñan con su príncipe azul, yo lo hago con mi superhéroe. Pero como nada en la vida es tan fácil, había un pequeño detalle que se interponía en mis sueños de felices por siempre; tenia esta novia de toda la vida, llamada Madison Reed alta, con curvas en los lugares correctos, un hermoso cabello oscuro como la noche, largo y abundante y como si esto no fuera suficiente poseía una inteligencia que la hacia destacar por encima de los demás estudiantes; era la presidente del comité estudiantil, ¡era absolutamente perfecta! ¿Cómo iba Ben a fijarse en mi? Era un renacuajo al lado de ella. Pero lo logre y es por esto que les voy a contar como: Durante años moría de amor en silencio por Ben, esperando mi oportunidad de estar con el, solo necesitaba una oportunidad, solo una. Pero en cambio, la relación con madison se hacia cada vez más seria, hablaban de casarse algún día, formar una familia y ser felices por el resto de la eternidad, ¡Mi felices por siempre! empezaba a perder la cordura, lo único que anhelaba era que el fuera mío, no importa lo que tuviera que hacer para conseguirlo, estaba dispuesta a cualquier cosas para reclamar lo que en mi cabeza me pertenecía por derecho, no era justo que ella lo tuviera y yo, no. En retrospectiva creo que al ser tan malcriada, pensaba que podría tomar lo que quisiera sin importarme por encima de quien tendría que pasar. Por esos días Ben se fue a la universidad para estudiar negocios y así, hacerse cargo de la empresa de su familia y Madison al ser la pobre niña sin recursos a cargo de una madre enferma, la típica historia de cenicienta, chica linda de clase media criada con una madre soltera, que grita a los cuatro vientos que si, que con esfuerzo se puede lograr todo lo que deseas y bla bla bla, tuvo que optar por quedarse aquí y hacer lo que pudo con su educación; pero con la promesa de Ben de casarse con ella, inmediatamente el terminara su carrera universitaria y que al volver ayudaría no solo a ella a lograr todos sus sueños, si no también la ayudaría a cuidar de su madre quien sufría una enfermedad que afectaba su sistema nervioso que se deterioraba cada día mas. Pero como nada esta escrito excepto el pasado, el destino me dio la oportunidad de tener eso que tanto quería; a Benjamín Black para mi. El padre de Ben hizo algunos malos negocios y necesitaba de manera urgente inyectar liquidez a su empresa para no irse a la bancarrota, (la familia de Ben se dedicaba al negocio de construcción y bienes raíces y la mía se dedicaba a la tecnología y creación de aplicaciones que facilitan la vida de las personas.) fue por esto que con mi ayuda, mi amoroso padre, decidió hacer la jugada que cambiaria nuestras vidas para siempre; instigue a mi padre para que le ofreciera a Peter Black todo el dinero que necesitaba, a cambio de que su único hijo se casara con la niña de sus ojos, es decir, Yo. No me costó mucho convencerlo, ya que al ser hija única, estaba acostumbrada a que mi papi me diera cualquier cosa que quisiera en el mundo y lo que quería era tener para mi al guapísimo Benjamín Black como mi marido. Convencer a mi hombre fue otra historia, ya que estaba dispuesto a mandar todo a la mismísima mierda por defender el futuro que había construido junto a Madison, llegando incluso a crear un plan en el que huiría con ella y renunciaría a su propia familia por defender su amor. Lindo ¿no? ¿Les dije que era el hombre perfecto? Pues lo era antes de mi. La noche en que Ben decidió que era más importante el amor que su futuro o su propia familia, su padre tuvo un grave ataque al corazón, en el que estuvo a escasos segundos de morir y fue este, el motivo principal por el que el amoroso y leal Benjamín Black, dejo a una Madison muy ansiosa y eufórica plantada en un cruce cerca de su casa. Obviamente, ella con su manera de ser dulce y comprensiva, entendió que el no podía abandonar a su padre, que lo que habían planeado era una total y absurda locura; y peor aun para el, que ella comprendiera que su madre estaba pasando por una enfermedad que no le permitiría valerse por si misma en un largo periodo de tiempo y solo pensar en esto la hizo caer en cuenta que su egoísmo y las ganas de vivir una historia de amor como en los libros, casi la hacen cometer talvez un terrible error. Así que volvió a su casa con su mochila barata, llena de los sueños no cumplidos y lloró durante horas por todo a lo que debía renunciar por el bienestar de otras personas. No imagino lo agotador que debe ser, pensar siempre en hacer lo correcto y poner a otras personas por encima de lo que una quiere, pensé: — ¿Quién en su sano juicio, es tan tonta como para sacrificar su propia felicidad por otro? — Es que en ese momento no lo entendía, mi egoísmo solo me permitía pensar en mi, en lo que yo quería y en lo que era importante para mi, yo, yo y solo yo. Que equivocada estaba, pero el destino me iba a enseñar que con el no se debe jugar, que no puedes simplemente decidir cuando y como cambiar la vida y los sentimientos de otro ser humano. Esto sería algo, que definitivamente pagaría con creces por muchos días de mi vida, y el precio a pagar iba a ser el dolor y la soledad, sumado al odio y el rechazo de la persona que amaba. Hola hola queridas lectoras, solo pasaba por aquí a contarles que, el libro ya puede ser adquirido en formato físico para quienes les gusta leer en papel, sentir las hojas y el olor a tinta.