Mein Engel

He tratado de explicarle, pero no me escucha, simplemente no me escucha, después de tanto gritar me y de golpearme, me dejó aquí tirada en el suelo frío, como si yo no fuera nada, como si fuera una muñeca de porcelana que ya se rompió y ya no quieren jugar con ella. Me siento reducida a menos que basura, me siento tan mal. Pero, lo hace porque no está pensando muy bien, solo... Solo está muy enojado, pero tiene que escucharme, para poder explicarle que no es como el creé, que está equivocado. Ese simple comentario de que " él está equivocado ", me causa gracia, él nunca se equivoca. Nunca se ha equivocado, a excepción de hoy. — ¡Levántate ahora Lisa!. Grito con su típico tono autoritario y dominante que tanto miedo produce a quién lo escucha. — ¡Vete a dar un baño, de solo verte así... Das asco, me das asco!. Me miró con una expresión de asco y desaprobación en el rostro, que me partió más mi ya herido corazón. Grito con palabras cargadas de veneno, mientras avanza hacía mi, y por instinto me encogí como pude para no recibir más golpes en él piso helado y sucio... Y lleno de mi sangre y mezclado con mis lágrimas amargas. — ¡Maldita sea Lisa no quiero verte, sal de aquí ahora!, A veces me pregunto por qué te amo, ¿Tú crees que me gusta hacerte esto? Pues no, pero ahora... No puedo ni mirarte a los ojos, tú no eres así, tú ya no eres mi... Lisa. Volvió a gritar para darse la vuelta y dejarme sola con mis lágrimas y mi corazón desecho, hecho polvo, me duelen tanto sus palabras crueles, ya no eres mi Lisa, ese comentario me destruye por dentro, cómo puede decir esas cosas si toda mi vida e vivido para quererlo, los sozollos más los espasmos en mi cuerpo hacen que ya mi adolorido cuerpo sufra más con cada uno de mis sozollos, cómo puedo trato de dirigirme a el baño de la habitación para darme un baño, Zinov no tolera la suciedad ni las cosas que no están en orden. Así que con las pocas fuerzas que me quedan y logro reunir, me arrastro por el piso frío y manchado del rojo carmesí, mientras mis lágrimas salen con fluides y mis sozollos hacen eco en la nuestra habitación, ya que con cada movimiento que hago es más dolor producido en mis ya débiles músculos, me apoyo como puedo de mis antebrazos soltando jadeos de dolor, con la mirada fija en mi objetivo, aunque mi vista es algo borrosa. La puerta del baño, como puedo llegó a el marco de la puerta del baño, trato de apoyarme en el marco de la puerta pero mis manos están resbalosas por la sangre en ellas, pero sigo intentando como puedo logro entre tambaleos ponerme de pie, un mareo recorre mi cabeza y ahogó un grito de dolor, siento un dolor punzante detrás de mi cabeza, lo ignoro para dirigirme a el lavabo, camino tambaleándo me y arrastrando mis pies y viendo todo mi mundo borroso, todo me da vueltas hasta que para mi mundo y vuelvo a ver "normal" pongo mis manos en el lavabo y me aferro a el lavabo para no caerme al piso, levanto mi cabeza al frente para mirar me en el gran espejo en la parte y no me reconozco. Tengo un ojo morado en su totalidad y inchado tengo cortes en mis brazos por los vidrios rotos, con los que me tropese, estoy cubierta de sangre y lágrimas... Siento mareos de nuevo y veo algo borroso, y unas grandes manchas negras algo distorsionadas se apoderaba de mi visión, y siento el miedo creer en mi interior. — Zi- zi... Zinov. Mi voz no sale muy bien, suena como un susurro inaudible, forzado, doloroso... Niego lentamente con la cabeza, para quitar esos pensamientos de mi cabeza. Pero tengo que explicarle a Zinov lo que paso, tiene que escuchar me. Tiene que saberlo, no soy lo que él cree, fue una trampa para él y para mí, para los dos. Tengo múltiples hematomas en mi cuerpo a causa de los golpes de Zinov, pero el que más me duele es por detrás de mi cabeza, llevo mi mano temblorosa a la parte de atrás de mi cabeza, y suelto un quejido de dolor al sentir el dolor punzante en la parte posterior de mi cabeza, veo mi mano y está llena de sangre... Me a roto la cabeza, esto fue excesivo Zinov... Pero rápidamente borro esos malos pensamientos sobre mi esposo y me concentro en lo que iba a hacer. Ah sí, cierto bañarme. Zinov ya no me querrá si sigo sucia, llena de sangre y moretones. Me dirijo a la ducha para lograr quitar toda esta sangre, pero en Medio del camino un gran mareo hace que pierda el equilibrio y caigo al suelo, golpeando mi cabeza con el frío piso de azulejos... Siento un pitido en mis oídos y trato de abrir los ojos pero veo todo borroso junto con manchas negras en mi visón, ya no tengo tantas fuerzas. Pero tengo que estar limpia y arreglada para Zinov, Si no se molestará mucho conmigo, más de lo que está ahora. La caída pudo haber sido peor, pude haber caído de espaldas y lesionarme aún más, pero caí de frente y gracias a mi brazo no fue tan malo. Con ayuda de mis antebrazos me arrastro como puedo por el piso, con mi objetivo al frente... Llegar a la ducha y mientras veo las puertas deslizables de vidrio y la tina, me trae tantos hermosos recuerdos que siento mis ojos picar con cada uno de esos recuerdos, dolorosos y hermosos a su vez. Una vez estoy frente a las puertas de cristal trato de deslizar la pero por la sangre en mis manos es resbaloso y se me hace más difícil, sigo intentando hasta que lo consigo. Desde aquí puedo escuchar a Zinov romper todo lo que se le atraviesa allá abajo, está muy tomado y así no podré explicarle nada ya que no me prestará atención, está muy molesto, pero si me hubiera dejado explicarle todo tal vez no hubiera reaccionado así. Abro la puerta de vidrio y con mucho esfuerzo me meto en la regadera, abro la llave y dejo que la cascada con agua tibia, limpie mis lágrimas, mi sangre, y me ayude con mi dolor... Él me golpea... Zinov me golpeó, pero lo hace porque me ama, lo hace porque soy su verdadero amor y lo hace porque tengo que aprender a comportar me y ser buena para él. No me interesa nada que no sea mi Zinov, no me interesa el dolor físico si con eso puedo estar con él. Ya me aconstumbre a el, además todos los seres vivos hemos experimentado el dolor... Zinov dice que el dolor me ayuda, a mi educación. También me sirve de recordatorio, los hematomas me ayudan a recodar que tengo que amar a Zinov sobre todas las cosas y las advercidades, Zinov es mi prometido y pronto será nuestra boda. Estoy tan feliz porque Zinov y yo ya formaremos una familia, Zinov no quiere hijos, pero lo convensere de tener uno o dos. El suele llamarme su ángel eso me encanta. Pero también me asusta. Zinov me ama. Lo sé, aunque su ultraviolencia me aterra, se que me ama, cada vez que me golpea es como un beso de verdadero amor. Así el me demuestra que me ama, Zinov me ama. Zinov me beso... Zinov volvio a golpear me... Pero Zinov me ama y nunca me dejara sola. Mientras la tina se llena de agua caliente mezclada con mi sangre y mis lágrimas. Escucho de nuevo es melodía que viene a mi. Cómo la primera vez que Zinov me golpeó. De pronto un dolor punzante y hagonizante se apodera de mi vientre, llevo las manos a mi vientre y siento como si fuera una licuadora adentro de mi. — ¡Ah, A... A....ayu... Ayudaaaaaa!. Un grito desesperado sale de lo más profundo de mi garganta, pero temo que nadie me escuché. Violines... Escucho los violines mientras lloro por el dolor punzante en mi cabeza, en mi vientre y en todo mi cuerpo, pero nada tan doloroso como saber que mi Zinov no me cree y no quiere verme, se que estoy apunto de caer en la inconsciencia. Esos violines me acompañan mientras caigo en la oscuridad. — Ti... te...a ...amo... Zinov. Y eso es lo último que logro decir para después caer en la inconsciencia, pero a lo lejos escucho un grito que me hace extremecer, pero ya es muy tarde para mí ya no puedo moverme, ya no puedo sentir nada, ya creo que ya no estoy en este mundo, creo que e encontrado la paz que todos anhelan, pero yo no la quiero si mi Zinov no está para acompañarme. — Lisa!!!!!. Hola mi gente hermosa, bueno aquí les dejo una probadita de lo que se viene, espero leer sus comentarios y me premien con sus hermosos votos.