Esbozo una sonrisa, para terminar de meterme en la cabaña, dejo las bolsas en el suelo y camino hacia el teléfono, espero conseguirme con línea, aunque sea para pedir rescate por si un oso intenta abusar de mi cuerpo. Inflo mis mejillas, marcando el número de mi casa o bueno, lo que es mi casa por el momento. Escucho el tono, moviendo mi pierna. ─Hola, familia Warlock ─responde mi madre. ─¡Mami! ─Digo, dramatizando. ─Christian, oh por Dios ¿Estás bien? ─Cuestiona con preocupación. ─Esto es horrible mamá, aquí escuchan música de navidad y hablan en jerga navideña… es mi peor pesadilla ─hablo rápidamente. ─Lo lamento tanto, que tengas que pasar por esto, pero… ¿cómo vas con lo de conseguir esposa? ─Inquiere sin tapujos. Arrugo mi cejo > Pienso dramatizando. ─Madre… soy guapo ¿