Capítulo 4

830 Kata
  "¡Suéltala! ¡Vete!" La voz malévola de Matt y el gemido de Nancy volvieron loco por completo a Jace.   "Jace Lu, yo si tengo piernas y puedo ir a donde yo quiera. Si hay alguien que debería retroceder, ¡definitivamente eres tú maldito ciego!" Luego de decir esas palabras hirientes y humillantes, Matt aceleró sus movimientos y llegó al clímax con Nancy.   Nancy se quedó jadeando en el suelo y sin moverse.   Matt se puso los pantalones con tranquilidad y se fue victorioso "Jace Lu, debiste pensarlo dos veces antes de sacarle los ojos a mi madre. Ahora prepárate, veras como destruyo a todos a tu alrededor!"   No había hablado muy alto, pero cada palabra que había dicho estaba llena de odio.   Jace apretó el puño tan fuerte que las venas de su brazo resaltaron, "Matt, solo el cobarde intimida a la mujer y se aprovecha de ella. Si tienes agallas, deberías buscar la evidencia para probar que yo asesiné a tu madre".   "¡Ja!" Matt dijo con desdén, se paró frente a Jace y se rio entre dientes en su oído, "Follar con mi cuñada es más divertido que buscar evidencia".   "¡Bestia!" Jace intentó golpear a Matt, pero él lo agarró de la muñeca a tiempo y lo empujó, "¡No voy a enfrentarme con un ciego, perdedor e incompetente!"   Mientras discutían, Nancy se despertó y agarró su vestido para cubrir su cuerpo rápidamente al ver lo que estaba pasando. "Tú..."   Todavía podía recordar lo que pasó ...   Pero ¿En qué momento apareció Jace?   ¿Lo sabía todo?   Matt se burló de ella. "No necesitas esconderte, aunque mi hermano mayor no pueda ver, todavía puedo decirle en qué partes de tu cuerpo he dejado marcas ..."   "¡Matt, eres un monstruo!" Nancy temblaba con el rostro pálido.   Estaba avergonzada de ver a Jace cuyo rostro no mostraba ninguna expresión ahora. "Jace, lo siento, merezco morir ..."   Corrió hacia la barandilla mientras terminaba de hablar.   Matt la humilló una y otra vez frente a su prometido. ¿Cómo podía tener el valor de vivir?   Matt echó un vistazo a lo que Nancy estaba haciendo, fue hacia ella con un gran paso y la agarró por la muñeca directamente, la volteó y la presionó contra las piernas de Jace. "¡Nancy Yuan, soy capaz de obligarte a suicidarte, y desde luego también soy capaz de forzar a todos a tu alrededor! Si te atreves a hacerlo, ¡toda tu familia se reunirá en el infierno!"   El hombre le pellizcaba del cuello con ojos inexpresivos, apretando los dientes y advirtiéndole.   Al ver ese rostro atractivo y familiar cerca a ella, Nancy cerró los ojos dolorosamente en lágrimas.   "¡Matt Lu, te arrepentirás de esto!" Nancy lo miró con sus ojos rojos llenos de odio.   "Bueno, no me hagas esperar demasiado para ese día". Matt sonrió con maldad, se dio la vuelta, terminó de vestirse con tranquilidad y se alejó a grandes pasos.   Nancy cayó al suelo paralizada como si no tuviese huesos y sostuvo la pierna de Jace, "Jace, lo siento, todo es mi culpa".   Jace la agarró por la muñeca a tientas. "Nancy, no hagas nada estúpido, esto no es tu culpa, es mía. Matt me odia tanto que trató de hacerme enfadar a través de ti. Cuando descubra la verdad, se arrepentirá".   A Nancy le salieron más lágrimas aún al ver a su prometido ser tan amable con ella, "Lo siento, estoy tan sucia ..."   "Tonta, estos pesares son todos por mi culpa ..." Jace abrazó a Nancy. "Compré una casa nueva en los suburbios. Tú te mudarás primero, y yo me mudaré allí después de casarnos. Ahí habrán guardaespaldas, así que Matt no se atreverá a molestarte".   Nancy asintió , "Gracias, Jace".   A pesar de que Matt se había vuelto amargado, Jace siempre había sido amable y agradable.   Después de que Nancy se mudó a la nueva casa de Jace, no volvió a ver a Matt.   Pero justo cuando pensó que ya todo estaba bien, descubrió que estaba embarazada.   Al mirar las dos líneas rojas en la prueba de embarazo, tomó una decisión difícil y firmó el consentimiento informado para el aborto en el departamento de obstetricia.   Ella era la prometida de Jace y no podía llevar al hijo de Matt en el vientre. La vergüenza que Matt le había traído a ella y a Jace ya había sido suficiente, ella no podía quedarse con el niño que se suponía que no debía venir al mundo.   Sala de operaciones.   Nancy estaba acostada en la mesa de operaciones, intentó varias veces tocar con su mano por última vez al niño que les pertenecía a ella y a Matt, pero nunca tuvo el valor de hacerlo.   Ella tenía miedo de no poder soltarlo una vez que lo tocara ...   El médico acababa de terminar de inyectarle la anestesia, "Bang", se escuchó un fuerte ruido y alguien pateó la puerta del quirófano.
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