Antes de que alguien entre, me libero de esos labios carnosos y del agarre de mi mano, mientras me apoyo en mi escritorio, tomando unos papeles del revés.
Miro quienes son estas personas ¡Cómo no! Boris, Andrés y Susana.
Todos ellos entra en mi despacho, Susana me mira mal y con una sonrisa burlona mientras niega con su cabeza. Esta mujer me pone nerviosa, ella se imagina de seguro que es lo que acaba de pasar.
—Buenos días pequeña _ Me habla Andrés con su gran sonrisa.
—Buen día Irina Antone_ Dice Susana con una gran sonrisa.
—No puede hacer nada,ellos entraron solos_ Escusa mi hermano.
Él sabe que odio que me molesten mientras estoy trabajando, auqnue últimamente con Antonello trabajar, parece algo imposible, no logro concentrarme cómo debo.Pero bueno tengo un caso que ganar. Auqn
