Vecina, odiame

Alex Collins

Aferre mis libros más a mí. No me importo en lo más mínimo que todas las personas me estuvieran viendo o algo, tenía que salir de allí sea como sea, no me gustaba estar entre tantos pijos ricos. Como pude seguí avanzando entre la multitud que se aglomeraba en el pasillo.

Estaba caminando o esquivando a las personas cuando choque con cosa y no era cualquier cosa, era una persona. Levante la mirada y mis mejillas se sonrojaron más de lo que ya se encontraban ¿acaso mi día podía ir de mal en peor? Unos ojos mieles ocultos detrás de unas gafas me observaban con detenimiento. Me acomode las gafas, para poder ver mejor. Y si, aún seguían esos ojos mirándome, pero esta vez con una sonrisa un poco torpe.

-lo siento – dije – no me había fijado por donde iba – el chico no dijo nada tan solo continuo mirándome, entonces yo hice lo mismo. Era alto, quien sabe tal vez unos ¿1.70? ¿1.78? sus largas piernas estaban cubiertas por un pantalón color beige, tenían su mochila en cargada en los hombros y se encontraba con una chompa color ¿guinda? Sí, creo que si.

-no te preocupes suele pasar... - dijo sin perder el contacto visual que teníamos – no eres de por aquí ¿verdad? –

Asentí.

-¿Cómo te diste cuenta? – pregunte confundida, porque la verdad era que nadie se había dado cuenta que era de otro lugar.

- tu... acento es diferente – dijo encogiéndose de hombros. – Soy Alex Collins. – agrego dándome la mano. La tome para después presentarme: - Sky O'Brien –

Y sin pensarlo empezamos a caminar juntos hablando de cosas sin sentido. Estaba completamente asombrada, si, asombrada gracias a que yo no era mucho de hablar con personas y mucho menos si se trataba de alguien de sexo opuesto.

Mire la hora en mi reloj.

-creo que ya debo irme – dije tomando mi bolso mientras me paraba de silla. Alex le dio un sorbo a su bebida para después pararse junto conmigo.

- yo también ¿Qué clase te toca? – pregunto.

- creo que... estadística. Si. Estadística – dije segura de mi misma. El asintió.

-bueno te acompaño – asentí. Empezamos a caminar fuera del comedor cuando mire como todas las personas de la nada hicieron una línea que se dividió en dos. Alex dejo de hablar para hacer lo mismo que las demás personas, yo me quede en mi lugar hasta que sentí como una mano me tomaba del brazo. Alex.

- ¿Qué sucede? – pregunte confundida. Alex se acomodó las gafas para luego decir: - es una regla que tenemos todos aquí. Tenemos que dejar pasar a... ellos – hizo una señal con su cabeza.

Dirigí mi vista hacia donde había señalado minutos antes. Había tres personas y todos eran hombres, pero eso no era lo resaltante cada uno tenia una belleza diferente, cada uno me llamaba la atención por algo o mejor dicho por algo que tenían en común: peligro.

El primero ya lo conocen, era Zayn que se encontraba en medio de ellos dos como si se tratara del líder, después venían dos detrás de él, ambos eran de tez blanca como la nieve, la única diferencia que tenían era que uno de ellos tenía un piercing en la ceja derecha.

El aire se atoro en mis pulmones en el momento que la mirada de Zayn y la mía se cruzó. Mi mente dejo de escuchar todo lo que decía Alex y tan solo se concentró en una sola persona. Zayn. Caminaba despreocupadamente como que si lo que sucediese le importase realmente parecía que estaba completamente acostumbrado a que las personas se habrán paso.

Las chicas gritaron su nombre al pasar al lado de ella, yo no dije nada, me limite a mirarlo al igual que hizo lo mismo. No quitaba la mirada de mí. Una chica se le acercó y le robo un beso ¿acaso era famoso? Zayn aparto la mirada para centrarla en la chica que tenia delante, entonces recordé... era la misma chica que estuvo en la habitación la primera vez que llegue.

Le dijo algunas palabras para luego alejarse de ella, Zayn tenía una sonrisa en los labios, pero ella tenía la cabeza gacha. Pobre puta.

Zayn después de su "minuto de fama" se acercó a donde me encontraba yo y sin mas deposito un beso en mi mejilla, mi cuerpo entero se helo, gire la mirada y vi como Alex tenia los ojos abiertos como platos ¿en dónde me había metido?

- ¿Qué haces? – pregunte en un susurro casi inaudible. Zayn sonrió de lado a la vez que me hacia una seña para que lo siguiera. Camino, pero yo no lo seguí hasta que él me tomo del brazo.

- ¿Qué sucede? – pregunte cruzándome de brazos una vez que ya estuvimos un poco alejados.

- te quería preguntar algo... – dijo un poco dudoso. Lo mire interrogante ¿Cómo se suponía que tenía que responder a ello? – quería saber si tu... ¿tienes planes para mañana? –

Contuve la respiración

-no... es martes ¿Por qué los tendría? - dije tratando de reír, pero me salió un poco diferente a lo que tenía planeado.

- ¿quieres venir a un concierto?, solo si quieres, voy a cantar – dijo tomando desacomodándose el cabello. Asentí.

- claro ¿Por qué no? ¿a qué hora? – pregunte

- es en la noche, pero podemos ir juntos, canto y después... si quieres la pasamos juntos – dijo encogiéndose de hombros. Sonreí.

- entonces mañana será. – dije aun con la sonrisa plantada en mis labios ¿Por qué? No lo sabia simplemente quería sonreír.

Nos quedamos en silencio por un momento cuando deje a recordé que había dejado a Alex y eso no era lo peor, en unos minutos tendría clase de estadística. Hice una seña con mis manos, las moví en dirección hacia donde quedaba la clase para luego decir: - tengo que ir – Zayn solo asintió, me despedí con un movimiento de mano y emprendí mi camino hacía la clase.

Allí se encontraba Alex

Me acomode mi cabello y sin más me acerque a donde él se encontraba. Estaba recostado en la pared mirándome fijamente con sus ojos mieles. Me sonroje.

-ya volví – traté de sonar casual, pero mis palabras salieron un poco temblorosas. Él sonrió para luego decir: - espero volverte a ver – se despidió y desapareció del lugar.

Entre en la estancia con la mirada en alto buscando algún lugar donde sentarme cuando en la parte posterior vi a Stacy leyendo un libro, ella levanto la mirada y al verme me llamo para que me sentara junto a ella, lo hice.

-hola – dijo saludándome con un beso en la mejilla. - ¿Dónde estabas? No fuiste a la fiesta del sábado. – agrego una vez que termine de acomodarme en la mesa.

- si tuve que ir a ver a mi familia. – ella asintió para después contarme como estuvo la fiesta. No le dije nada solo continué escuchando todo lo que decía hasta que el profesor entro y dicto su clase.

La clase se estaba haciendo completamente aburrida gracias a que no entendía nada de lo que me hablaba porque siempre que hacían ese tema yo me dormía o algo. Copiaba y copiaba todo lo que tenía anotado en la pizarra cuando escuche el toque de la puerta, al instante dirigí mi mirada hacia allí como lo hicieron todos los alumnos allí presentes.

En el umbral de la puerta se encontraba un chico de mi edad más o menos, tenía el labio partido, su ojo derecho se encontraba morado y una de sus manos estaba vendada. Stacy me dio un golpecito para que le tomara atención.

-en la fiesta, Zayn se peleó con él y lo dejo así, pero eso no es lo interesante, él no tiene ni un pinche rasguño – moví mi vista hacia el chico de al frente, era verdad, él parecía que había peleado con dos o cuatro hombres, pero solo había sido uno y ese uno no tenía tantos daños a comparación de él entonces lo confirme:

Todo lo que dice Zayn es verdad.