Aixa y yo nos sorprendimos al escucharla. Aixa sonrió y dijo: "¿Acaso es tu nueva víctima, ahora vas por niñeras". Yo sonreí y respondí: "Ella es una gran amiga la conozco hace años. De todas formas, jamás fuí racista cuando se trata de mujeres, simplemente voy por niñeras, amas de casa, amas de llaves. hasta mujeres muy maduras. -Lo que no entiendo es por que estas, interrogandome, deberías ser feliz y casarte de una vez, con ese gran amante que tienes ahora". Aixa sonrió, después de oírme. ella sabía que había herido mi orgullo, después de lo que dijo sobre Ralph. Luego dijo: "Por qué siempre terminamos peleando, vine a despejarme no a pelear. vamos a comer algo, tengo mucha hambre". Yo me puse serio y respondí: "Aixa esperó que te cases. seas feliz y comas, lechugas. pero tú y yo te