Todos partimos al lugar, donde la fiesta se llevaría acabó. No era muy tarde, asi que al principio pensaban hacer una fiesta normal, y aburrida, para las familias. luego la fiesta seria, para que los jóvenes pudieran disfrutar un poco mas. Max y Jack, querían embrigarse y alocarse, cuándo todos los jefes de familia, se hayan marchado. Yo bebia un vaso de whisky, en la enorme barra del bar. Max y Jack se acercaron a mí para charlar un rato. Ellos llegaron muy felices, como si nada hubiera pasado. Max se acerco y dijo: "No te oí felicitarme, tampoco a Jack. ¿acaso no estas feliz por nosotros?". Yo miré a Max, muy serio. mi rostro era el de un demonio, al que recién habían liberado, del infierno. Max se hizo hacía atrás al verme. el parecía asustado, como si su vida estuviera en peligro