El profesor de mi primo

Por alguna extraña razón había prometido irle a ver en el colegio a mi primo el cuál había conocido hace poco nunca supe de su existencia hasta que mi tío dio a conocer su relación con la madre de él, desde ese día empezamos a platicar a conocernos y a saber más del otro. Me había hecho prometer que asistiría a un evento que se iba a realizar en su colegio con desgana tuve que decir que iría. No soy de esas chicas que les gusta salir ir de fiesta o incluso ir de compras, más bien prefiero estar sola en mi habitación escuchando música a todo volumen mientras leo un gran libro, lo sé dirán que nerd pero un libro puede envolverte del tal manera que puedes imaginarte dentro de este. En fin, había llegado el gran día (O el más aburrido es lo que pensaba.) Me desperté por los rayos de luz que llegaban a entrar por la persiana de mi habitación, aún no había elegido que ponerme así que opté por algo no tan llamativo un top n***o, una chaqueta de igual color, un pantalón de mezclilla y unas vans me vi una última vez en el espejo y decidí salir de mi departamento e ir a la dirección que me había mandado por mensaje. (Vivía sola ya que decidí ir a estudiar en el norte y me quedaba lejos, ir desde donde vivía con mis padres después de un buen tiempo rogándoles que me dejarán ir a vivir sola aceptaron.) Nunca había escuchado de este colegio y me hizo difícil encontrarlo decidí ir a coger un taxi de esta forma pueda llegar, fue más complicado de lo que pensé prácticamente ni el señor sabía dónde era. Después de haber estado 30 minutos dando vueltas en círculo llegamos era un colegio bonito demasiado grande para la cantidad de estudiantes que había. Decidí llamarlo no lo encontraba incluso llegue a pensar que el taxista se equivocó después del tercer pitido respondió. -Si? -Llevo 10 minutos aquí y no te encuentro. -Espera, sigue mis indicaciones hasta que llegues aún no estoy listo y no te puedo salir a verte. Había estado haciendo todo lo que me había dicho hasta que llegue a un edificio de 4 pisos me dijo que suba al 3ero y busque la puerta "B" así lo hice golpee y abrió un señor imaginé que era algún profesor por su atuendo, pero vaya que era guapo según mis cálculos no pasaba de los 33 se notaba sus músculos parecía que cuidaba mucho de su físico y bueno quien no desearía estar en esos musculosos brazos. -Disculpe busca a alguien- Eh hizo que saliera de mis pensamientos no tan apropiados. -Sí, buenos días disculpe se encuentra Tomás soy una amiga, de hecho su prima (en mi subconsciente esa palabra aun no tenía sentido seguía siendo algo nuevo) Me miro confuso asintió y abrió la puerta en señal de que entre, logre ver a mi primo en una esquina de este salón me acerqué y me sonrió eufóricamente con un abrazo el cuál no respondí, se podría decir que no soy la clase de niña cursi y sentimental que suele haber. La mayor parte del día él paso hablando sobre algo o alguien no le prestaba mucha atención ya que mi vista y mis pensamientos se desviaba ante tan atractivo profesor, el cuál empezó a dar indicaciones sobre lo que íbamos hacer, él es tan guapo tan musculoso podría ser un modelo incluso, un momento él también me está viendo porque lo hace desvíe mi mirada de esos ojos avellana pero no sirvió de mucho sentía su mirada seguir mis movimientos. Diablos que hago me siento vulnerable ante esto ya no quiero que me mire. Creo que se dio cuenta que evitaba mi mirada de la de él que dirigió su vista hacia la puerta dando una indicación de que los representantes haremos algo y por lo tanto debíamos salir o eso creía. Seguía en mis pensamientos cuando escuche un carraspeo. -Señorita si fuera tan amable de acompañarnos.- lo mire y me sentí avergonzada ya todos habían salido y sólo quedábamos los dos sentía como mi sangre se calentaba, como mis cachetes se ponían rojos no dije nada me levanté y me dirigí hasta la puerta la cuál fue cerrada de golpe no entendía nada, no sabía porque la cerró si me acababa de decir que salieron junto con los demás. Sentí su respiración en mi cuello sabía que estaba detrás de mí pero no entendía porque tan cerca mi respiración se entrecortaba y decidí encararlo girando sobre mis talones y ahí estaba el con una sonrisa radiante observando mis movimientos.-Dis. . . disculpe podría dejarme abrir la puerta no entiendo porque la cierra tan de repente. El sólo me miraba y sonreía.- Dios que hago no creo que me haya visto cuando se me caía la baba al verlo hablar. -Vi cómo me mirabas incluso sentí que me desvestías con ella.-Carajo como lo sabía no creí haber sido tan obvio. -Amm. . . Yo. . . Bueno yo sólo prestaba atención a lo que indicaba. -Ni siquiera sabes lo que eh dicho si lo hubieras hecho estarías con los demás padres de familia y no aquí enfrente de mi temblando como lo estás. Mierda, mierda, porque estoy tan vulnerable el no debería provocar esto en mí. -Yo sólo me entretuve en mis pensamientos es por eso que no lo escuche pero creo que ya debería salir. -Te intimida que este tan cerca de ti que huela el olor de tu perfume.- Se acercó a mi cuello y empezó a dar pequeños besos en él, Dios que bien se sentía. -Nnn. . .no es eso sólo que creo que debería ir con los demás. Se alejó de mí, abrió la puerta y sin dudarlo salí. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Intentaba olvidar mis pensamientos borrar lo que había sucedido hace un momento pero no podía quería que hubiera seguido quería que me haga sentir en el cielo, y estoy segura que lo hubiera conseguido si con unos simples toques en mi cuello logró estremecerme que hubiera pasado si seguía tocando mi cuerpo.