Fabiola Hernández es una chica extrovertida y muy simpática. Es la mayor de tres hermanas. Por la pandemia del COVID—19 se quedó sin empleo, pero eso no la llevó a deprimirse, todo lo contrario, la llevó a reinventarse. Envió algunas solicitudes como asistente virtual por todo el mundo. Era su oportunidad de llegar a probar de qué estaba hecha. Solo había un pequeñísimo, pero muy diminuto problema. Fabiola solo habla español y la compañía que la contrata es rusa. ¿Qué pasará cuando el traductor sea el único intermediario entre Yuri Sokalov y la dulce Fabiola?