Capitulo 14

2169 Palabras

Savina Abrí los ojos con una pesadez que parecía extenderse por todo mi cuerpo, como si cada extremidad pesara una tonelada. Un dolor sordo recorría mis músculos, una mezcla de cansancio y un recuerdo punzante de la noche anterior que me hacía imposible moverme sin sentirlo. Y entonces, lo recordé. Massimo. Él, con su intensidad desbordante, siempre un paso más allá de lo que esperaba o podía anticipar. Él, con esa manera de reclamarme como si yo le perteneciera desde siempre. Él, con la brutalidad que bordeaba entre lo insoportable y lo adictivo. No había sido solo sexo. No con él. Anoche no me había follado; me había destrozado. Me había empujado más allá de mis propios límites, rompiendo cada defensa que había construido, y lo peor era que no podía decir que no me había gustado, p

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR