Capítulo 1
Pov 's Olivia
Desperté, miré al reloj en mi mesita de noche y en este marcaba las 7:40 de la mañana. Apresurada salí corriendo de la cama, me quité la ropa arrojándola al suelo y entré a la regadera, me bañe con velocidad, salí de esta y lavé los dientes, me vestí, miré al espejo y seguido de eso tomé mi mochila y baje a la cocina. Al llegar caminé hasta sentarme en una silla frente papá, este me sonrío al verme.
-Por fin te bañaste -río Mateo
Levanté la vista hacia mi hermano, su cabello rubio estaba revuelto y sus ojos cafés estaban llenos de burla, luego miré a Asher mi hermano de 14 años, tenía el mismo cabello que Mateo y los ojos azules iguales a los de mamá y los míos. Siempre me dicen que soy una copia exacta a mi madre cuando era joven, pero hay una gran diferencia entre mi madre y yo, y esa es que cuando ella tenía mi edad siempre fue muy femenina y dulce con todos o eso es lo que dice papá de ella y yo pues dedico mi vida a divertirme con mis amigos, aclarando que sigo siendo virgen.
-Y a ti cuando se te quitara lo estúpido? -pregunte con falsa inocencia
-Oliv -negó con desaprobación mi progenitora- y buenos días
-Hola, mami, qué bella te ves el día de hoy -sonreí- papi, buenos días
-Buenos días, mi princesa -saludo papá viendo el periódico
-Papá, es por tu culpa que Olivia es tan mimada -se quejó Mateo
-Hasta aquí huelo tus celos, idiota -le respondí tomado un sorbo de café
-Jaja, si claro, ¿Por qué tendría celos de alguien tan salvaje como tú? -pregunto con molestia Matt
Lo miré y sonreí- Por qué soy perfecta y porque soy la hija favorita, ah y a quien todos
aman
-¿Tu la hija favorita? -soltó una carcajada- ese soy yo
-Sigan participando, ineptos, el hijo favorito soy yo -se burló Asher
-Tu eres adoptado -bromeé
-Eso no es cierto, la adoptada eres tú -respondió Asher empezando a molestarse
-Ya niños dejen de pelearse, ninguno es el favorito -dijo mamá- los amamos a todos por
igual
-Pero tú eres mi favorita, princesa -susurró papá muy alto
-Papá! -se quejaron Matt y Ash
-Amor, deja de estar metiendo sisaña -replicó mamá
-Lo siento, Cerecita -dijo papá y la besó
Terminé mi taza de café y me puse de pie.
-Ya es tarde me voy -avisé queriendo salir de su momento acaramelado
-¿Con quién te vas? -preguntó papá frunciendo el ceño
-Con Anahí y Yael -respondí tomando mi mochila
Anahí es la hija de una de las mejores amigas de mi madre llamada Brooke, somos mejores amigas desde que andábamos en pañales al igual que a Yael que es hijo de Cassandra, ellas son como mis tías postizas.
-Eso espero, Olivia, no quiero nada de novios -me recordó papá
Rodé los ojos- papá no seas exagerado
-Nadie se acercará a ti hermanita y de eso nos encargaremos papá, Asher y yo -dijo mi hermano mayor
-Mamá! -pedí ayuda
-Ya déjenla en paz, si ella quiere tener novio lo va a tener -apoyó mamá
-Nunca sobre mi cadáver -contestó papá- hasta los 30 años
-¿Te recuerdo a qué edad nos hicimos novios? -preguntó mamá
-Eso es irrelevante, Cerecita -se molestó papá
-Ajam… -mamá entrecerró los ojos
Reí. Un mensaje me llegó a mi celular haciéndolo sonar, lo desbloqueé y leí el mensaje el cual era de mi mejor amiga avisándome que estaban afuera, me puse de pie y tomé mi mochila.
Guardé mi teléfono- Me voy
-Cuídate -papá besó mi mejilla
Salí de la casa hacía el carro de Yael, subí y después de saludarnos vi a mamá en la puerta de la casa.
-Adiós, niños, cuidado -se despidió mamá en un grito
-¡Adiós, Tía Melany! -contestó Anahí
Veinte minutos después estábamos caminando hacia el interior del instituto, hicimos una parada en los casilleros, comencé a sacar mis libros.
-¿Que les toca ? -preguntó Anahí mirando su teléfono
-Matemáticas -contesté con aburrimiento
-Historia -respondió Yael
-A mi Geografía -gimió Anahí- ¡qué flojera!
-No entiendo por qué odias esa clase -reí
-Odia a la maestra, la aburre mucho! -explicó Yael
El timbre sonó dando el inicio de la primera hora.
-Nos vemos en ingles, bye, nena -me despedí y me alejé de su lado
-Bye, bebé -se despidió Anahí en un grito
Salí corriendo hacia el salón ya que faltaban tres minutos para que cerrarán la puerta, llegué al salón y la puerta por suerte estaba abierta, suspiré y entré al salón, el maestro me miró con atención
-Se dice puedo pasar -me recordó
Sonreí disculpándome- hola profesor, ¿puedo pasar?
-Ya está adentro, señorita Coleman, que no se repita -dijo el profesor
Después de unos cinco minutos y de que todos los estudiantes llegaran a sus asientos, el maestro se puso de pie y empezó a explicar.
-Bien alumnos, vamos a empezar con la clase, el día de hoy vamos a ver ecuaciones de tercer grado factorizadas, saquen una hoja y anoten lo siguiente -habló el maestro
La puerta de entrada se abrió haciendo que todo el salón quedara en silencio, por ahí entró la directora
-Buenos días, profesor Harwey, chicos -saludó la directora sonriendo
-Buenos días, directora Cisneros -respondieron algunos
-Se que es mitad de año, pero el día de hoy entrara un nuevo alumno de intercambio -anuncio la directora.
-De acuerdo -aceptó el profesor
-Chicos les presento a Killian Everlyn -dijo la directora y se hizo a un lado dejando pasar a el chico
Tendría unos 18 o 19 años, sus ojos eran hermosos de color verdes, un cabello castaño claro alborotado, usaba una playera roja que dejaba ver sus trabajados y musculosos brazos. ¡Oh por dios!, ese chico es un completo orgasmo visual. ¡mierda mis bragas!
-Señorita Coleman, le estoy hablando -llamó el profesor
-¿Eh? -regresé en si
-Le decía que usted será la encargada de mostrarle y ayudar a el estudiante Killian para que se acople más a él instituto ya que es la alumna más aplicada por no decir casi perfecta -comentó
-Si, está bien -dije aún embobada
-Bien, joven Everlyn, tome asiento por favor a lado de la señorita Coleman -ordenó y me apuntó
El se sentó a lado de mi, se veía como esos chicos malotes que no hablaban nada así
que espere que estuviera callado pero no fue así.
-Hola -saludó con una sonrisa
-Hola -respondí- bienvenido
-Gracias, es lindo que una chica tan bonita me reciba así
Me sonrojé- oh, que bien
-¿Cuál es tu nombre? -enarcó una ceja
-Olivia -respondí sin mirarlo
-Así que así se llama la señorita perfección -comentó sonriendo
-Oh, si -reí e hice un leve movimiento de cabello- soy tan perfecta
-¿Ya han dejado de hablar? -preguntó el profesor
Nos callamos de repente, miré a mi alrededor y me sonrojé al ver que todos nos estaban
viendo.
-Si -dije aguantando la vergüenza
-Bien prosigamos, como les decía antes de que sus compañeros me interrumpieran -me miró- de trabajo indicativo les encargaré que hagan un cuestionario de 500 preguntas sobre todo lo que hemos visto desde que empezó el año escolar no se preocupen, va hacer en parejas, aclarando que sus parejas serán la persona que tienen a lado -anunció el profesor
Volteé a mi derecha y si, era evidente que sería Killian. ¡Yupi más orgasmos metales!. El profesor nos entrego la gran pila de hojas de ejercicios a cada pareja y terminó diciendo que la fecha de entrega es el martes, eso es en 5 días, ¡Oh no!
-Bueno pueden salir ya -anunció y todos salimos del salón
Pasaron las clases en donde estuve ayudando y conociendo a Killian hasta que llegó el descanso, el fue a dirección y ya no lo vi más, caminé hacía la cafetería y vi a mis amigos en una mesa, me acerqué a ellos.
-Hola, niños -saludé sentándome
-Oye, ¿supiste que entró un chico de intercambio? -preguntó Anahí
-Si, es mi pareja de matemáticas y lo he ayudado en clases -mencioné tomando mi jugo
-Suerte la tuya, ¿y cómo es? -se interesó Anahí
-Es un bendito orgasmo mental -chillé emocionada
-Ay, mujeres -sonrió Yael- se llama Killian y entró al equipo de americano como mariscal
-Oh, es jugador -aplaudió Anahí- es perfecto
Iba a hablar, pero alguien se sentó a mi lado
-Hola, señorita perfección -saludó Killian
-Hola -respondí confundida
-Oye, venía para ver dónde nos juntaremos para hacer el trabajo -cuestionó
-¿Te parece hoy en mi casa? -suspiré
-Si, está bien, dame tu número y me pasas tu dirección -dijo sacando su celular7
Le di mi número y se levantó de la mesa
-Bueno gracias, señorita perfección, nos vemos hoy a las 3:00 p.m., te escribiré -dijo y se fue
-Ahh -gritamos Anahí y yo
-¡Te verá hoy!, e irá a tu casa! -dijo Anahí
-Si -acepté
Se acabó el descanso y prosiguieron las clases hasta la salida, me fui en el auto de Yael
con Anahí y llegué a mi casa
-Adiós, niños! -me despedí
-Suerte con el bombón -gritó mi mejor amiga
Entré a la casa y ellos se alejaron.
-Hay alguien? -pregunté en voz alta
-Si, cariño, estamos en la mesa -dijo mamá
Fui a la cocina y…, ¡oh no!
-Papi, que haces aquí? -pregunté inquieta
-Pues aquí vivo, princesa -respondió con sarcasmo
-Hablo en serio, ¿no deberías estar trabajando? -cuestioné
-Decidí pasar toda la tarde aquí -contestó
¡Oh no!, papá estará aquí junto con mis hermanos y vendrá Killian, adiós a mi plan de poder conocerlo más.
-Vas a comer? -preguntó mamá sacándome de mis pensamientos
-Este…, si, pero me voy a cambiar -dije
-¿Te pasa algo, Oliv? - mamá enarcó una ceja
¡Diablos!, mamá me conocía muy bien. Negué y salí de la cocina hacia mi cuarto, volteé a ver el reloj de mi mesa de noche marcaban las 2:45 pm. ¡Mierda!, faltan 15 minutos y aún no se que ponerme. Empecé a sacar todo hasta que encontré lo indicado. ,Miré al reloj 2:57 p.m., bajé corriendo y me senté en la mesa recibiendo la mirada de todos
-¿Y ahora tu? -preguntó Matt
-¿Yo que? -enarqué una ceja
-Te ves diferente -agregó Ash
-Vas a salir? -preguntó papá
-No -dije sería
Mamá no decía nada solo se me quedaba viendo de forma graciosa, el timbre sonó.
-Voy a abrir -dijo papá
-¡No! -grité- quiero decir yo voy
Me levanté y fui hacia la puerta, la abrí y ahí estaba Killian sonriendo.
-Vaya, señorita perfección, definitivamente haces honor a tu apodo, con todo te vez perfecta... -comentó
-Hola -saludé- gracias, adelante pasa
Me hice a un lado y lo dejé pasar
-Tu casa es hermosa -dijo- igual que tú
Me sonrojé y solo sonreí.
-Bien, ven vamos a mi cuarto a trabajar -dije nerviosa
Lo agarré de la mano y lo conduje hacia la escalera
-Oliv -llamó mamá viéndome y después a Killian
-Hola, señora Coleman -saludó nervioso Killian
-Dime Melany, por favor, ¿y tú eres? -mamá cuestionó
-Killian Eve... -intentó responder el castaño
No pudo acabar por qué tres personas más entraron a la sala. Oh no...
-¿Y este quien es? -preguntó mi hermano mayor
-Mateo! -replicó mamá
-Me llamo Killian -dijo Killian incomodo
-¿Y que haces aquí, Killian? -insistió papá
-Amor -mamá a le dio una mirada fulminante a papá
-Yo vine a hacer un trabajo de matemáticas -dijo el chico a mi lado
-¿Y por qué con Olivia? -se molestó Asher
-El maestro nos puso así -dije- ahora ya no nos distraigan más y déjenos trabajar
Le volví a agarrar la mano y cuando íbamos a mitad de escalera…
-Olivia, aquí en la sala -dijo papá
-Mamá -busqué ayuda de mi madre
-Déjalos amor, seguramente se sentirán mejor haciendo las cosas en su cuarto -murmuró mamá
-Que cosas? -preguntó Mateo en un grito desde la cocina
-Pues la tarea, idiota -contesté enfadada
-Ok, solo recuerda que se escucha todo hasta acá abajo y los estaré observando -dijo en tono amenazante papá
-Ajá -asentí sin darle importancia
Volvimos a retomar el camino hacia mi cuarto, entramos y cerré la puerta.
-Lindo cuarto -dijo Killian
-Gracias -respondí
-Bien empecemos con esto
Apenas íbamos a empezar a leer cuando mi puerta se abrió de golpe
-Mantengan distancia -dijo Asher
-Ajam… -dije
Pasaron como 5 minutos y la puerta se abrió de nuevo.
-Los estoy vigilando -dijo Mateo amenazante
-Si ahora déjanos trabajar -gruñí y se fue- oye lo siento por esto
-No pasa nada, tengo una hermana de 16 años y no me gusta que nadie se le acerque entiendo -comentó
Intentamos volver a el trabajo pero de nuevo se abrió la puerta
-¿Cómo siguen? -preguntó Asher
-Ok, suficiente! -levanté la voz
Me levanté del suelo me dirigí a la puerta, empujé a mi hermano fuera y cerré con
seguro.
-Abre la puerta, Olivia Coleman! -gritó papá
-Déjenme trabajar -grité en respuesta
Volvimos al trabajo y está vez sin interrupciones, logramos llegar hasta la pregunta 100.
-Vaya estoy cansada -suspiré
-Nunca en mi vida había usado tanto mi cerebro -dijo el
Nos empezamos a reír como locos.
-De que te ríes? -preguntó
-No se, ¿de que te ríes tu?
-Tampoco lo sé -respondió
Y volvimos a reír.
-Bueno creo que debo irme a casa, gracias por recibirme -dijo poniéndose de pie
-No es nada, ¿no quieres quedarte a cenar? -pregunté guardando los libros
-No, no quiero incomodar, a parte no creo que le haiga agradado mucho a tu papá y a tus hermanos -murmuró un poco incómodo
-No es eso, es que soy la única mujer y me sobre protegen mucho -dije- ven como una amenaza a todos los chicos que se acercan a mi
-No te preocupes yo también te sobreprotegería si tuviera a una hermana tan linda como tú
-Que tierno! -pensé
-Gracias -dijo sonrojado
Ok, pensé en voz alta...
-Bueno me voy -anunció
-Mañana a la misma hora? -pregunté
-¿Te parece si mañana más temprano?, es que tengo que cuidar a mi hermano a las 6:00 p.m. -mencionó
-Tienes otro hermano? -pregunté
-Si, se llama León y tiene 4 años -respondió
-Está bien, ¿entonces a la 1:30 p.m.?
-Te parece si saliendo de la escuela te traigo en mi carro para acá y así acabamos rápido? -preguntó
-Está bien, entonces así quedamos -dije poniéndome de pie
-Bueno entonces me voy -murmuró
-Oh, ya entiendo, te acompaño a la puerta -sonreí
-Si gracias, es que podían lincharme alguien -dijo
-Ven, vamos -lo agarré del brazo.
Abrí la puerta haciendo que mi hermano mayor y menor se cayeran al suelo, era obvio que estaban detrás de la puerta.
-Ridículos -dije y bajé las escaleras junto a Killian
Llegamos a la puerta
-¿Ya te vas Killian? -preguntó mamá
-Si, señora Melany -dijo amablemente
-¿No te quedas a cenar? -siguió mamá
-No, hoy me toca hacer a mi al cena en mi casa así que me voy, muchas gracias por todo -se despidió Killian
-No es nada, aquí te esperamos cuando gustes -dijo mamá
-Gracias -Killian sonrió- adiós, señorita perfección, gracias por recibirme en su casa
-Adiós mi matemático favorito -dije risueña
-¿Matemático favorito? -preguntó con curiosidad
-Si, es que eres muy bueno en matemáticas y como eres el único que conozco así pues por eso eres mi matemático favorito -sonreí con simpleza
-Bueno me siento halagado de tal puesto
Y ambos reímos, cuando iba a abrazarlo un carraspeo me detuvo.
-Adiós Killian -dijo papá
-Adiós, señor Coleman -respondió Killian -Bye, señorita perfección
Y se fue, cerré la puerta y suspiré, sabía que será una larga noche....
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Y hasta aquí el primer capítulo espero les haya gustado y que voten mucho, bye.
LOS AMO!!