"¿Eres consciente de lo que estás diciendo?"
Gu Hanzhou juntó las cejas con fuerza y sus profundos y oscuros ojos la miraron fijamente, como si quisiera conocer sus pensamientos.
Xu Yinuan definitivamente sabía de lo que estaba hablando.
Quería ayudarlo
Es decir, hacer el amor con él.
No era una niña. Sabía exactamente lo que estaba haciendo y sería responsable de sus actos.
"Me deseas. Eres mi prometido y no debería negarme"
Caminó hacia él con sus delgadas y temblorosas piernas; cada paso se le hacía más complicado. Era imposible no sentir miedo.
Sin embargo, al final de cuentas dejó a un lado su temor y decidió complacerlo en este momento.
Le castañeaban los dientes, le temblaba la voz e incluso su respiración se aceleró.
Se detuvo enfrente de la bañera,
