Cómodamente acostumbrada a la vida de la ciudad, a las galas y reuniones en sociedad, Beatrice Montés siente palidecer ante la idea de mudar su vida al campo, encerrada en la hacienda de su padre, a quien el médico le ha recetado aire puro y fresco para su recuperación. No obstante, en aquel lugar olvidado por la mano de Dios habrá de conseguir el amor verdadero, de manos de Amadi, un esclavo criado en cautiverio que le enseñará miles de cosas, además de mostrarle un mundo nuevo en el que ni siquiera las amenazas de su obstinada y racista madre, o las reprimendas de su odiosa institutriz, parecen importar.

Perteneciente a la Ivy League, la H.S University reúne a la crema y nata de la sociedad. Hijos de políticos, famosos y millonarios que, al igual que sus padres, cuentan con un prestigio tremendo que podría ser mortalmente arruinado si la prensa amarillista se llegase a enterar de sus movidas privadas. Luego de años de relación, Abby Lines decide terminar con su novio Kendrick, ¿la razón? Siente que la costumbre ha sustituido a la pasión. Por desgracia para ella, Kendrick no lo toma demasiado bien, y totalmente convencido de que ella aún lo ama, y de que pueden recuperar lo que tenían, comienza a perseguirla y hostigarla. Cansada, Abby decide fingir una relación con un chico guapo y peligroso que grita pasión por todos lados, quien no sólo logra espantar a su molesto ex novio, sino que también parece capaz de ofrecerle todo lo que ella siempre quiso: Aventura, adrenalina y sexo... buen sexo.

LA RELACIÓN ES FINGIDA, PERO EL DESEO NO PODRÍA SER MÁS REAL.Erick y Olivia no podrían ser más diferentes. Mientras que él es un multimillonario exitoso, ella batalla por sacar adelante su carrera universitaria y no morir en el intento, pero la vida y el amor obran a veces de formas muy extrañas y por completo inesperadas. Tras hacer un trato que los beneficiará a los dos, concretan un matrimonio falso y dejan en claro que solo durará mientras sea estrictamente necesario, pero eso es antes de acabar profundamente enamorados el uno del otro. Empeñados en negar lo obvio, se esforzarán por ocultar sus sentimientos hasta que el destino los haga ver que, para el amor, no hay ningún obstáculo que valga.